“Pues también nosotros fuimos de esos que no
piensan y viven sin disciplina: andábamos descarriados, esclavos de nuestros
deseos, buscando siempre el placer. Vivíamos en la malicia y la envidia, éramos
insoportables y nos odiábamos unos a otros. Pero se manifestó la bondad de Dios,
nuestro Salvador, y su amor a los hombres…”Tit 3,4
En la región había pastores
que vivían en el campo y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños. Se
les apareció un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de claridad. Y
quedaron muy asustados. Luc 2, 8-9
¡Feliz navidad queridos
hermanos! le doy gracias
a Dios por compartir con ustedes la Palabra de Dios, que es nuestra Luz y
nuestra Salvación, gracias porque están ahí, esperando la Palabra de Dios que
alimentará sus vidas y a cuantos se las compartan; esta mañana también les agradecía al Señor…
Gracias Señor por tu inmensa bondad,
que bonito este amanecer de estar ya envueltos en la luz nueva de tu
Palabra hecha Carne: Jesús, a quien esperábamos, a quien le decíamos. ¡Ven
Señor! ya está con nosotros, como no darte gracias Señor Dios nuestro que cada
año nos alegras con la festividad llena de esperanza de nuestra redención.
Este año le pedía al Señor empezar de nuevo desde el pesebre, desde donde
empezó toda la historia de nuestra salvación,
donde nació nuestro Redentor, y fue tan hermoso hacerme consciente en cada
minuto de estas fiestas de la verdad más grande de mi vida, ¡Ahora soy
luz! y no me canso de repetirlo en mi
interior, ¡por Jesús ahora soy luz! El Señor me ha hecho pasar todas las
celebraciones muy conmovida por este Amor tan grande, me ha llenado el corazón,
me lo ha colmado y sigue ahí, dándome la alegría más grande, el gozo inmenso de
compartirlo
Antes era tinieblas y ahora soy luz, porque “yo también era de esos que no
piensan y viven sin disciplina andaba descarriada, esclava de los deseos
buscando siempre el placer….Pero se
manifestó la bondad de Dios en mi vida, su Amor se me manifestó, se me apareció
su luz resplandeciente, su Gloria me envolvió con su claridad, y mi
historia cambió, ahora es otra, (es después
de Cristo, DC)…porque ahora al Único que
busco es al Señor, El es el único placer, motivo, y motor de mi vida, las cosas
de este mundo han perdido su brillo, Él es la Luz resplandeciente que brilla
cada mañana en mi vida, porque le da sentido a todo lo que vivo, su Palabra que
todo lo ilumina todo lo aclara todo lo descomplica es mi disciplina a seguir, AHORA SOY LIBRE, no mas esclavitudes:
esos sentimientos, pensamientos, depresiones, que siempre pueden aparecer,
ahora todo lo puedo vencer en Jesús, Palabra de Dios que me hace ver mi
verdadera identidad, ahora lo que vivo lo vivo en Jesús. Por eso para mí, la Navidad es Jesús, es celebrar la llegada de mi
Salvador personal. Recuerdo que estos
días escuchaba a personas que me decían… “esta navidad va a ser muy triste
porque mi esposo se ha ido de la casa con otra, porque mi hija está
enferma….porque no tengo dinero…porque no tengo esto… porque no tengo lo otro …etc.
El Señor me decía diles que Yo, Jesús estoy viniendo para que tengan,
para que no les falte nada….Yo vengo para que tengan Vida, y vida en
abundancia….vida a lo grande.
Él es la Gloria inmensa la bondad
inmensa que tu vida necesita…el Amor, el amigo, el compañero, el Esposo, la felicidad, el Bienestar que tanto añorabas
“Diles que Navidad no es una fecha más en el calendario, Navidad Soy
Yo que vengo a salvarles acompañándoles en esas situaciones para
hacerles ver la Verdad de sus vidas”. Y fue tan bonito el día de ayer, poder compartir con algunas
de esas personas la alegría de la
Navidad, que Jesús viene para los que estamos pobres, necesitados, llorando por
compañía, por cosas materiales, Jesús viene hasta por los que tienen de todo, hasta para los que no se acuerdan de El, . ¡ Jesús viene para todos!.
Llos ángeles se presentaron a unos
humildes pastores. En el silencio de la noche, ellos cuidaban sus rebaños porque
era todo lo que tenían para vivir, lo consideraban muy importante para sus vidas
y no querían que se los roben los cuatreros. Pero cuando el Ángel le dijo: …”vengo
a comunicarles una buena noticia que será de mucha alegría para el pueblo: hoy
en la ciudad de David ha nacido para ustedes un Salvador…”, dejaron todo, se dijeron unos otros “vayamos hasta Belén
a ver lo que ha sucedido y que el Señor nos ha dado a conocer.”
Nosotros somos esos pastores, que estábamos en la noche cuidando nuestros
resentimientos, nuestra pena, guardando luto por años, y tantas cosas que
vivimos rumiándolas en nuestro interior porque nos gusta, porque nos ha
esclavizado nuestra manera de ser y no queremos soltarla. Ahora es tiempo de
nacer de nuevo, dejarlo todo, de decir también, “vayamos hasta Belén a ver lo que ha sucedido y que el Señor nos ha
dado a conocer.”
Es tiempo de dejarlo todo, dejarlas
en el pesebre y empezar una nueva historia con Jesús, si aun no le hemos
abierto el corazón, DE HECHO, si hasta ahora solo ha sido de palabra, te digo que aun es tiempo estamos en la OCTAVA
DE NAVIDAD, o sea que la Fiesta continua, seguimos celebrando que Jesús ya está
entre nosotros, este es tiempo de Gracia, María nos ayudará a abrir el corazón,
pedírselo a Ella, la llena de Gracia, María
está esperando junto al pesebre a los humildes que no le tienen miedo al cambio,
a los valientes, a los decididos que de
verdad quieren cambiar su pobreza interior para dejar entrar la Riqueza del
Reino de los cielos, que ha bajado, que se ha hecho pobre, para enriquecernos, María
está esperando para darnos a su Hijo, así como esperó a los pastores así
María, Madre de Dios, la elegida para
darnos a Jesús, nos espera para contagiarnos la alegría de ver que Dios cumple
sus promesas ha enviado a su pueblo un
Salvador. ¡Jesús ha nacido para ti,
nunca lo olvides!
Dios nos bendiga.
Nila